La Fundación Rafael del Pino albergó -en colaboración con la Red Española del Pacto Mundial de Naciones Unidas-, el 24 de abril de 2012, la presentación del libro “Emprender con responsabilidad”, de Ángel Pes y Norbert Bilbeny, publicado por LID Editorial Empresarial.
En el acto intervinieron Amadeo Petitbò, Director de la Fundación Rafael del Pino; César Piernavieja, Coordinador editorial en LID Editorial Empresarial; Juan de la Mota, Presidente de la Red Española del Pacto Mundial de Naciones Unidas; y Ángel Pes, Subdirector General y Director de Responsabilidad Corporativa y marca de CaixaBank, en representación de los autores.
Ángel Pes afirmó que el mensaje básico de la responsabilidad corporativa es especialmente necesario en estos momentos: «Todo el mundo ve claro que la salida de la crisis no se puede plantear con políticas para pasado mañana; se tiene que plantear en un horizonte a medio y largo plazo. Esto implica, en muchos casos, pasar por el valle de lagrimas inicial antes de alcanzar de nuevo la colina, el horizonte que permita mirar el mundo después de la crisis. Tenemos por delante unos años difíciles, esto es evidente. Precisamente por ello, la planificación y el fijar unos objetivos a medio y largo plazo son elementos absolutamente necesarios para superar el momento actual. De forma muy inmediata, los problemas que encontramos y que encuentran muchas empresas son, por ejemplo, problemas de restructuración, de reducción de plantillas… etc. Estos procesos, en principio, negativos, también pueden hacerse de muchas maneras. Incluso para realizar este tipo de operaciones que, a corto plazo, son dolorosas, se puede hacer que este dolor se minimice y, en esto, también los criterios de responsabilidad corporativa tienen una gran aplicación porque las dificultades que hay que atravesar tendrán un impacto distinto si se abordan a partir de dichos criterios».
La crisis refuerza el mensaje de la responsabilidad corporativa, según Ángel Pes: «Las empresas, para tener futuro en cualquier lugar del mundo, tienen que tener -además de ser eficaces en la gestión de su negocio- legitimidad social; y esta se obtiene cuando el conjunto de la sociedad percibe a las empresas como agentes que contribuyen a solucionar los problemas. Este enfoque es precisamente el enfoque de la responsabilidad social corporativa: una empresa es socialmente responsable cuando con su actuación contribuye a resolver los problemas de la sociedad y este hecho es valorado por la propia sociedad, y por lo tanto, refuerza el carácter o la capacidad emprendedora de la sociedad. Creo que el discurso de la responsabilidad corporativa no solo no sale perjudicado sino que es mas necesario que nunca en el contexto actual».
